La luz horizontal

 

Te maté tantas veces sin quererlo

te enterré lentamente en un recuerdo

olvidé tu frágil arquitectura

entre una tarde y otra sin entenderlo.

 

El mundo solo fue mudo silencio

mientras no estabas tú ni tu frescura

que llenaba de luz y de hermosura

mi flaca juventud y mi deseo.

 

Ahora que solo soy un indefenso

recuerdo tu claridad, mi titubeo,

la luz meridional sobre tu cuerpo

 

sintiéndonos tan juntos sin saberlo

amándonos tan pronto sobre el suelo

muriendo en el amor siempre muriendo.

2 comentarios:

Txus Etxeberria dijo...

Simplemente maravillosa poesía

eli mendez dijo...

Como un maravilloso reencuentro, asi son los versos que has escrito, tan hermosos. Un abrazo y bonito fin de semana!!!